CAUTO Y PRECAVIDO
¿Qué veo en el espejo que refleja
mi yo? No reconozco esa mirada.
¿Dónde la ingenuidad, en mí confiada,
pues ojos suspicaces asemeja?
¿Dónde está la inocencia que pareja
leal fue de mi niñez endulzorada?
¿Acaso por la edad abandonada
buscó refugio en cara menos vieja?
Los años me cambiaron y han traído
suspicacia y temor; mas me han robado
la confianza que yo hube tenido.
Triste melancolía me ha embargado
al ver la candidez como se ha ido,
y me ha dejado cauto y precavido.